lunes, 9 de diciembre de 2013

COMUNMENTE BELLOS: Garceta común.

La mayoría de las veces cuando salimos a determinados lugares en el campo, sobre todo dentro del mundo de la ornitología lo hacemos (y me incluyo) buscando la rareza, ser el primero en observar el ave más espectacular, la que viene de más lejos, la que nadie ha visto aún, le primera migrante del año de una especie determinada, que no se nos adelante nadie en comunicar ese avistamiento.

Por lo general eso hace que nos pasen desapercibidas algunas especies que o bien no tienen apellido, o si lo tienen su apellido es común o vulgar.

Son tan frecuentes que no reparamos en ellas y nos perdemos su extraordinaria belleza, que por ser cotidiana nos pasa muchas veces desapercibida.

La primera especie que he escogido para esta serie del blog es la Garceta común Egretta garceta, es tan frecuente ya en nuestras rías que no solemos prestarle demasiada atención, más pendientes de la aparición de gaviotas delaware, porrones especulados o falaropos picogruesos, entre otros. 

Para mi gusto es una preciosa novia con medias negras bajo zapatos amarillos, una combinación curiosa que ningún estilista aprobaría pero que en ella resulta de una preciosa elegancia.


Sin duda ha de gustarse cuando se mira al espejo, lo que ve se resume en dos palabras: Bella y mortal. Su pico como un puñal unidos a ese cuello largo que lanza a gran velocidad son una enorme amenaza para los peces de los que se alimenta. Es curioso verla mover el suelo con un movimiento temblequeante de sus patas para levantar a sus presas.


Da igual que vaya arreglada o esté "des-plumada" tras desperazarse de una siesta, su belleza perdura a pesar de su común apellido, de la frecuencia con que la vemos o de las maravillas que la rodeen. 

Se trata sin duda de una especie comunmente bella y que formará parte de muchas de nuestras rutas Trekkapp, si la veis deteneros a observarla, seguramente os parecerá tan bella como a mí.


miércoles, 4 de diciembre de 2013

Vuelta a la naturaleza

Tras meses de ausencia del blog, espero tener tiempo para volver a dedicarselo y traeros algunas fotografías, sentimientos y algunas de las cosas que me gustan de la naturaleza.

En mi vuelta he querido irme a algo muy sencillo, hoy he visto en facebook una fotografía que colgaba Onofre Alonso del otoño en la ciudad. Ayer por la mañana estuve haciendo con Trekkapp la ruta de Fuso de la Reina, una ruta semiurbana en Oviedo y allí pude hacer algunas fotografías interesantes que os quiero mostrar.

Con dos grados de temperatura dolían las manos desnudas con la cámara en la mano, pero no era el único, el sol aún no calentaba y los pájaros como este petirrojo se afanaban en buscar comida con la que calentar su cuerpo.


Gracias a que el ojo está adaptado a buscar la diferencia, pude localizar este zorzal común Turdus philomenos, entre la hojarasca, aunque con la poca luz que había lo de fotografiarlo en condiciones ya era otra historia.


 A medida que iba caminando los 3 km que me separaban de la Casa de la montaña, el sol iba subiendo y sus rayos colándose entre las copas de los árboles y dándome momentos mágicos. Esta casi bajo la autovía A-66.
 

Y algunos rincones se iluminaban destacando más que los colores del otoño, la mágica luz del otoño invierno.


Que llegó a su momento cumbre al asomarme al área recreativa ya cercana al parque de invierno y tener estos fuertes contraluces con las hojas del castaño y las mesas y bancos del área.


 Y a la vuelta cuando ya el sol tenía más fuerza comenzó a deshelar las barandillas que limitan la ruta dejando bien a las claras, que la naturaleza está en cualquier lado.


Gracias, espero que os guste y si queréis hacer esta ruta está en Trekkapp con el nombre de Fuso de la Reina y si buscáis por concejos: Oviedo.